Ex policía imputado de abuso sexual afirmó que “todo fue consentido”

En el juicio iniciado ayer las cámaras de seguridad del Hospital Regional Río Grande aportaron imágenes que muestran una situación completamente diferente a la que denuncia la supuesta víctima.

A la denuncia de una joven de 18 años de edad que dijo haber sido sometida sexualmente en octubre de 2021 por un agente de la Policía provincial que se encontraba realizando tareas de vigilancia en el nosocomio riograndense, se contrapuso la postura del imputado César Daniel Carbajal, respaldada por filmaciones, testimonios y certificados médicos. Ella dijo en una radio en abril de este año que por un implante coclear su disminución auditiva no es un impedimento “para hacer realidad mi sueño de entrar a la Policía” y que “soy una persona normal”.

El ex agente de la Policía de Tierra del Fuego acusado de haber abusado sexualmente de una joven con “disminución hipoacúsica y dificultad del habla”, en el interior de un baño del Hospital Regional Río Grande -en octubre de 2021- decidió hacer uso de la palabra para decirle a los jueces Eduardo López, Juan José Varela y Ricardo Locatelli, del Tribunal de Juicio en lo Criminal, que la relación sexual que tuvo con la denunciante “fue un hecho consentido”.
El martes 20 de septiembre dio inicio el debate oral y no público (al tratarse de un delito contra la integridad sexual), en el que César Daniel Carbajal está acusado de haber abusado sexualmente en dos ocasiones, mediante tocamientos impúdicos en una primer oportunidad y acceso carnal, en una segunda, de una joven, bajo amenazas y valiéndose de su condición de funcionario público para cometer la presunta agresión sexual.
Luego de la declaración del imputado, el Tribunal procedió a reproducir los dichos que la joven había realizado en Cámara Gesell, y seguidamente declaró la madre de la chica que hoy tiene 19 años de edad.
Lo que muestran las cámaras
En los 11 meses que transcurrieron entre la denuncia formulada por B.S., se recopiló abundante material fílmico que proveyeron las cámaras de seguridad instaladas en distintos sectores del HRRG y testimonios de pacientes que el día de los hechos investigados, estaban en el nosocomio.
En contraste con lo que declaró la joven, quien afirmó que ella concurrió a atenderse como paciente y que el policía la llevó bajo amenazas a un baño para abusar de ella, las filmaciones la muestran caminando tranquilamente junto al hombre, luego de lo cual sale del edificio “para comerse una hamburguesa” – según consta en el expediente, y después presumiblemente de que él la hubiere tocado en sus partes íntimas y besado.
Horas más tarde las cámaras vuelven a registrarla ingresando al nosocomio, a las 17, en donde entra a un baño con el mismo policía con el que se había reunido en su primer visita, sin mediar violencia a la vista, y vuelven a salir juntos al cabo de un rato. A esa hora se ve a una gran cantidad de personas transitar por el establecimiento pero a ninguna de ellas la denunciante se acerca ni les dice nada.
Sobre lo ocurrido Carbajal dice que tuvieron una relación sexual consentida en todo momento y ella que él la violó salvajemente y con brutalidad. Las pericias no obstante no certifican ninguna lesión, ni moretones ni lesiones vaginales ni en ninguna parte del cuerpo de la mujer y tampoco hay marcas o heridas de defensa en el cuerpo del policía.
Un cuarto intermedio
El Tribunal de Juicio pasó a un cuarto intermedio hasta el miércoles 21 de septiembre, para continuar con la etapa de testimoniales, de la que forman parte 13 testigos.
El Ministerio Público está representado por el fiscal Jorge López Oribe y la defensa del imputado la ejerce el abogado Francisco Giménez.

Diario Prensa