
El Papa Francisco recibió el alta médica y reapareció en público
marzo 24, 2025
El Pontífice, que estuvo internado en el Hospital Gemelli de Roma por problemas respiratorios, saludó a la multitud con un mensaje de agradecimiento antes de continuar su recuperación en el Vaticano.
Después de pasar 38 días en el Hospital Policlínico Gemelli de Roma, el Papa Francisco recibió el alta médica y volvió a hacer su aparición pública. El Pontífice de 88 años fue trasladado en silla de ruedas al balcón que da a la entrada principal del hospital, donde cientos de personas se habían congregado en una soleada mañana de domingo para brindarle su apoyo. Con una sonrisa y levantando el pulgar, el Papa saludó a los presentes, pronunciando un débil «¡Gracias a todos!» ante el micrófono, antes de abandonar el hospital.
Este evento marcó el regreso del Pontífice a la vida pública luego de haber sido hospitalizado el pasado 14 de febrero debido a una neumonía bilateral. A lo largo de su internación, los boletines médicos confirmaron la gravedad de su situación, pero también mostraron una lenta pero constante mejoría. En estos días difíciles, el Papa Francisco fue acompañado por las oraciones de millones de personas de distintas creencias, quienes elevaron sus plegarias por su salud.
Andrea Tornielli, director editorial del Vaticano, compartió un mensaje que resumió el profundo sentimiento de la comunidad global durante estos días de incertidumbre: «Nos ha mostrado que, incluso en el sufrimiento, la vida tiene sentido y que cada momento es valioso. Su recuperación es una prueba de fe y esperanza para todos.»

Durante su internación, el Papa no dejó de enviar mensajes a sus fieles, como el emotivo saludo del 6 de marzo, cuando se conectó virtualmente con los asistentes a una oración en la Plaza de San Pedro. Además, el 16 de marzo fue la primera vez que se le vio, aunque desde la distancia, mientras rezaba en la capilla del hospital tras celebrar misa.
La vida del Papa, marcada por su compromiso con los valores cristianos, nos ha enseñado a encontrar en el sufrimiento una oportunidad de testimonio y de fe. Su mensaje constante desde la habitación del hospital fue claro: la guerra es absurda, la paz es urgente y siempre debemos estar dispuestos a actuar en favor de la humanidad.
Hoy, después de tanto sufrimiento y esperanza compartida, el Papa Francisco regresa al Vaticano para continuar su recuperación, recordándonos que, a pesar de las adversidades, la fe y la oración pueden iluminar los momentos más oscuros.
¡Bienvenido de vuelta a casa, Santo Padre!