
El estafador de los restaurantes sigue atacando y come gratis en todos lados: ¿Cómo lo logra?
marzo 24, 2022
El delincuente ya fue detenido más de 46 veces, pero siempre se las arregla para zafar de prisión. Su último golpe ocurrió hace algunas semanas. Conocé su inverosímil historia.
Antonio Miguel Grimal Marco tiene 47 años, nació en Barcelona y hace más de cinco años que no paga la cuenta en los restaurantes que visita. No, no es un influencer al que invitan para promocionar al hogar. Es más, los dueños y encargados no quieren verlo ni cerca de sus locales: ya acumula más de 46 detenciones por negarse a pagar el ticket y no parece tener intenciones de detenerse.
El hombre es oriundo de la provincia de Aragón, en España, y ya es conocido por la policía de Zaragoza, según indicó el Heraldo de Aragón. Pero de una u otra forma se las ingenia para evitar sanciones graves.

¿Cómo es su modus operandi? Por más irreal que suene, su método es extremadamente sencillo y lo repite una y otra vez: come y bebe lo que desea, pide la cuenta y le dice al mozo que no pagará. Si este último lo amenaza con denunciarlo, espera sentado con indiferencia a que llegue la patrulla e incluso provoca a los trabajadores.
«El muy cabrón le dijo al camarero que le pusiera una cerveza mientras llegaba la Policía. Es un jeta«, afirmó uno de los propietarios del bar zaragozano Espumosos 5M, Juanjo Gracia, en diálogo con Cadena Ser.
Además, hay que tener en cuenta las veces perjudicados no quisieron poner denuncia y perdonaron la deuda al estafador.
Su última detención ocurrió en un restaurante de la plaza Emperador Carlos, donde tal y como hace siempre, se negó a pagar lo consumido. Pero el dueño estaba dispuesto a que salga airoso y llamó a la policía.
La patrulla se presentó en el lugar, se entrevistó con ambas partes y, tras corroborar que era totalmente cierto todo lo que decían los dos, los efectivos detuvieron a Antonio Miguel Grimal, pero no la estafa que confesó, sino porque no facilitó a los policías un domicilio conocido ni les transmitió la fiabilidad suficiente de que se iba a presentar ante la autoridad judicial cuando fuera requerido.
De acuerdo al medio aragonés, Grimal Marco fue detenido el pasado 13 de marzo tras dejar sin pagar la cuenta de nueve restaurantes(los pagos en cada local iban de los 13 euros hasta los 97). Pero no suele ser así, ya que según una sentencia que dictó el Tribunal Constitucional en 2017, en casos de delitos leves no se puede aplicar la agravante de reincidencia, porque se impondrían a los encausados «penas desproporcionadas».
La única vez que estuvo a un paso de la prisión.
Ese mismo año, vivió la situación más comprometida judicialmente: La Policía lo llevó esposado desde la prisión de Zuera, donde lo habían mandado los jueces por no responder a sus reiteradas citaciones y por temor a que siguiera cometiendo estafas.
En ese entonces, la Fiscalía pidió tres años de cárcel y una multa de 2160 euros por dos de sus estafas: había cenado en un hotel con un par de amigos y no quiso pagar los 143,30 de la cuenta, mientras que también pedían un año de cárcel y multa de 1.440 euros por ticket de 52,60 euros.
Sin embargo, no consiguieron que la multa fuera tan elevada y este delincuente solamente tuvo que pagar 270 euros. Fue así porque Grimal solo recibe una pensión no contributiva, lo que facilita se libre de las sanciones y, como máximo, le impongan una orden de alejamiento que le impida volver al restaurante estafado.
Fue así que esa mañana la representante del Ministerio Público se centró en llegar a un acuerdo con la abogada defensora del acusado, que salió de la audiencia «con un tirón de orejas»: dos condenas de 270 euros por ambos delitos de estafa leve y la obligación de pagar las dos cenas.
Fuente Cronica.