Se incendiaron dos vehículos estacionados

En un caso por una falla eléctrica y en el otro, por un sahumerio encendido en el habitáculo.

El domingo 7 de agosto, a las 15 estimativamente, bomberos del Cuartel Zona Norte y policías de la Comisaría 3era acudieron a uno de los departamentos del barrio “Gustavo Giró”, edificio N° 4, en donde en el sector lateral se estaba incendiando un automóvil.
Envuelto en llamas en su parte frontal, un rodado Citroen C 3 Picasso, de color negro, propiedad de Romina Paola Pereyra Suárez, de 43 años de edad, aparecía estacionado y sin ocupantes.
Una vez extinguido el fuego que afectó también el marco de la puerta del departamento de la planta baja, la propietaria y su madre, Haydeé Angela Pereyra, de 79 años de edad, comentaron a los servidores públicos que el incendio se habría producido debido a una falla en el sistema eléctrico del automotor.
El vehículo había sido puesto en marcha momentos antes por Pereyra Suárez, quien ingresó unos minutos a su departamento, mientras el rodado se calentaba. Al salir, se encontró con el incendio declarado por lo que dio inmediato aviso a los bomberos.
Otro siniestro en un vehículo se produjo el pasado miércoles 3 de agosto, a las 10.20, en el estacionamiento de la base del Glaciar Martial. Hasta allí acudió una dotación bomberil del Cuartel Central, efectivos policiales de la Comisaría 2da y agentes de Defensa Civil Provincial, quienes constataron al arribar que se estaba incendiando el habitáculo de un rodado Fiat Uno, de color gris. En el lugar se encontraba su propietario, el instructor de esquí Nicolás Beltrame, de 37 años de edad, quien refirió que momentos antes había estacionado su rodado dejando al descender del mismo, las puertas con el sistema de cerradura activado. Minutos más tarde algunas personas le avisaron que del interior de su automóvil salía humo, acudiendo con prontitud a ver qué ocurría. Luego de destrabar las puertas con cierre centralizado, observó que la parte del torpedo, volante y consola plástica, estaban ardiendo.
Una vez concluida la tarea de extinción del fuego, Beltrame comentó que antes de bajarse y ausentarse del automóvil, dejó un sahumerio encendido justamente en donde se localizó el mayor derretimiento de plástico.

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