
Trabajadora denuncia abandono y maltrato laboral
junio 7, 2025
Emilia Maciel relató su dura experiencia como empleada de limpieza en el Hospital Modular de Tolhuin. La mujer, que debe enviar dinero a sus hijos en Misiones, quedó sin empleo tras enfermarse y recibir reposo por 24 horas. En lugar de comprensión, recibió un despido por mensaje de texto. Advirtió sobre graves irregularidades en la empresa Servicios Integrales Ushuaia. “Faltaban insumos básicos y nosotras teníamos que dar la cara, nunca ellos”.
Emilia Maciel rompió el silencio y relató su dura experiencia como empleada de limpieza en el Hospital Modular de Ushuaia. La mujer, que debe enviar dinero a sus hijos en Misiones, quedó sin empleo tras enfermarse y recibir reposo por 24 horas. En lugar de comprensión, recibió un despido por mensaje. “El 22, que era martes, me escribieron para decirme que no me presentara más. No me dieron explicaciones, ni me llamaron. Me dejaron sin trabajo por estar enferma”, contó Maciel en diálogo con FM Aire Libre. Lamentó que nadie de la empresa —Servicios Integrales Ushuaia— haya dado la cara: “Héctor y Érica manejan todo desde la sombra. Nunca se presentaron ni respondieron cuando hubo problemas”. Maciel aseguró que su despido no fue solo sorpresivo, sino también injustificado y sin el pago correspondiente: “Me deben un mes entero y la liquidación. Fui a la Oficina de Empleo, donde al menos me están asesorando. Voy a seguir reclamando, necesito ese dinero. Mis hijos dependen de mí y no tengo ningún otro ingreso”. Durante su paso por la empresa, también denunció precariedad y desinterés por parte de los responsables: “Faltaban insumos básicos y teníamos que poner plata de nuestro bolsillo. Cuando había quejas de los médicos, nosotras teníamos que dar la cara, nunca ellos”. El testimonio de Maciel también expone una situación que persiste entre sus excompañeras: “Las chicas que siguen trabajando hace tres meses que no cobran. Tienen miedo de reclamar y perder el trabajo. Erika, Héctor y Amanda no aparecen, no responden, ni siquiera por teléfono”. Por último, afirmó que decidió hacer público su caso porque se cansó del destrato: “No quiero enviar más mensajes, ni insistir. Héctor tiene una forma de responder que no me gusta y me hace mal. Voy a iniciar acciones legales. Estuve cuatro meses, cumplí con todo, y así me pagaron”.
