
Cuatro perros murieron en un incendio que habría sido intencional
junio 7, 2025
Ocurrió en una casilla del Barrio Las Raíces, en Ushuaia, en donde no hubo ningún piadoso gesto vecinal para rescatarlos.
El siniestro tuvo lugar el jueves por la mañana en una alpina, en la parte alta de la ciudad. Las llamas consumieron el 90% de la estructura. La Policía y la Justicia investigan si el fuego fue provocado en el marco de múltiples conflictos del dueño de la vivienda con terceros, quien denunció el hecho recién a la noche.

Un incendio devastador ocurrido el jueves por la mañana en una casilla tipo alpina del Barrio Las Raíces, en la parte alta de Ushuaia, terminó con la muerte por calcinación de cuatro perros que se encontraban en su interior. Pese a la presencia de vecinos en las inmediaciones, ninguna persona intervino para intentar salvar a los animales, lo que incrementó la indignación ante la falta de compromiso y solidaridad evidenciada. La estructura, construida con madera y cartón, sufrió una afectación del 90%, según estimaron los bomberos que trabajaron en el lugar. Personal de la Comisaría Quinta y de los cuarteles de Bomberos Zona Norte y 2 de Abril intervinieron en el operativo.

Cabe destacarse que posteriormente se pudo saber que la vivienda pertenece a Dante Flores Iriarte, de 34 años de edad, quien no se hallaba presente al momento del siniestro. Sugestivamente, recién se presentó a radicar la denuncia cerca de las 20, más de 12 horas después del hecho, pese a que el incendio había sido difundido desde temprano por radios y portales locales.
El caso enseguida tomó un giro judicial, dado que Flores Iriarte cuenta con al menos tres frentes de conflicto que ahora están bajo investigación como posibles móviles del atentado. Uno de ellos involucra a su ex pareja, quien le habría entregado los cuatro perros apenas una semana antes del hecho, en el fragor de la separación. Otro conflicto se relaciona con una persona que reclama haberle comprado la casilla y no haber recibido la posesión y el tercero tiene que ver con una profunda enemistad con un vecino.
La Policía y la Justicia investigan ahora a la ex pareja de Flores Iriarte, al presunto comprador de la casilla y al vecino, en principio, sin descartar otros posibles cabos que permitan determinar quién es el peligroso incendiario que no dudó en provocar un incendio en un lugar en donde claramente se podían escuchar los ladridos de los cuatro infortunados animales. Este proceder hace imperiosa la necesidad de esclarecer el penoso suceso, a fin de determinar las características psicopáticas de alguien capaz de cometer semejante un acto de inhumanidad y su potencial capacidad para repetir en el futuro el mismo tipo de acción de extrema crueldad, con otros seres débiles.
Más allá de la eventual autoría material, lo acontecido puso en evidencia un factor social que no pasa desapercibido: la pasividad de los vecinos. A pesar de que la zona es densamente habitada, ninguna persona intentó rescatar a los animales ni forzar una entrada para sacarlos. El silencio y la inacción contribuyeron al fatal desenlace, generando cuestionamientos sobre la empatía y el compromiso ciudadano ante situaciones de emergencia que involucran a seres sintientes.
Fuente: diario prensa